La talla (cut) es una de las cuatro características que determinan el valor y calidad de un diamante, y probablemente uno de los que influye más en la apariencia de la joya. Por tallar, hacemos referencia a dar forma a los diamantes o gemas en bruto para resaltar al máximo sus propiedades de transparencia, color, brillo, lustre, dispersión, etc, destacando así su belleza.
Es un arte denominado “lapidación”, realizado por profesionales altamente especializados, que estudian el diamante o gema en bruto y mediante complejos cálculos y profundo conocimiento de las propiedades de cada mineral, escogen el corte más apropiado para cada diamante o gema en particular (ya que por tamaño, forma, etc, como ha sido extraído o encontrado en la naturaleza, cada uno está “llamado” a ser tallado de forma diferente).